Se estima que más de la mitad de las 26,6 millones de viviendas de nuestro país son ineficientes energéticamente, puesto que están construidas antes de 1980, cuando no existía ninguna normativa sobre condiciones térmicas. Hogares que, con un lavado de cara energético, ofrecen un ahorro en el bolsillo del propietario/a o inquilino/a.
Así que, si el año pasado no llegaste a tiempo de beneficiarte de las subvenciones y ayudas a la eficiencia energética de viviendas y edificios residenciales, todavía puedes hacerlo. Buena parte de ellas se han prorrogado para 2024.
Además de las ayudas en el IRPF por la eficiencia energética en viviendas, también se mantienen las ayudas de la Unión Europea a la eficiencia energética a través de los fondos Next Generation EU, bonificaciones en el IBI e ICIO en algunos municipios y otro tipo de programas autonómicos. ¡Te los detallamos!